Débora Espinel protagoniza el primero de los ‘Encuentros de motivación’ del Xerez CD de Baloncesto

• La veterinaria conversó con los jugadores EBA y júnior sobre el cambio que experimentó su vida al quedar en silla de ruedas

La veterinaria Débora Espinel Lara ha protagonizado el primero de una serie de encuentros con un marcado carácter motivacional, organizado por el Xerez CD de Baloncesto y que ha contado con la colaboración de Autoescuela Cabrera que cedió sus instalaciones.

Los jugadores EBA y júnior del club xerecista compartieron esta sesión con Débora Espinel, en la que relató su experiencia vital tras una operación quirúrgica por la que quedó parapléjica, teniendo que afrontar su vida desde entonces en una silla de ruedas.

La presidenta del Xerez Club Deportivo de Baloncesto, Antonia Beltrán, agradece a Débora Espinel su colaboración en este ciclo de encuentros “por el ejemplo de superación que supone para los jóvenes que tras conocer su experiencia serán capaces, seguro, de relativizar las dificultades que se encuentren en su camino como deportistas. Estamos trabajando ya en los siguientes encuentros con deportistas de Jerez que han superado situaciones complicadas”.

Licenciada en Veterinaria por la Universidad Alfonso X El Sabio y Especialista en Odontología y Cirugía Maxilofacial veterinarias por la Universidad Complutense de Madrid, Débora explicó a los jugadores cómo había huido del victimismo por su situación, aunque ha tenido que enfrentarse a unas ciudades y a unas empresas que no estaban adaptadas a las necesidades de personas con movilidad reducida.

De hecho, no encontró trabajo en las clínicas veterinarias por no disponer del espacio necesario para una persona en silla de ruedas. Entró a trabajar como coordinadora de campañas en un Centro Especial de Empleo (Transmitel Contact Center), donde dirigió un equipo de personas con y sin discapacidad. Actualmente, trabaja en Ortopedia San Dionisio. Ha protagonizado o participado en campañas de las marcas Woman Secret´s, Atendo, Sunrise Medical o Elsavadeboda, entre otras, convirtiéndose en rostro habitual de la Revista Vogue.

En la parte positiva, Débora destacó cómo la solidaridad de muchas personas le permitió afrontar un año de rehabilitación en un centro especializado en Santiago de Compostela, y que gracias a la silla de ruedas pudo sacarse el permiso de conducir y tener un coche adaptado que antes no pudo conseguir, al no reconocérsele las limitaciones físicas que le provocaba en las piernas un tumor en la columna vertebral que se detectaría posteriormente.

Tras un periodo de varios años de recuperación y adaptación, Débora practica deportes que jamás se hubiera planteado con anterioridad y es, fundamentalmente, una persona independiente.